La realidad de las calles de las Islas Baleares, uno de cada 3 niños se encuentra en riesgo de pobreza y exclusión
Una cruda realidad: Uno de cada 3 niños que viven en la Islas Baleares, el 34,1%, se encuentra en riesgo de pobreza y exclusión.
De hecho, un 28,9% de los menores de 18 años en España está en situación de pobreza. Este porcentaje sube hasta el 33,4% si a la tasa de pobreza se le añaden la carencia material y social severa y la baja intensidad laboral.
Es decir, la mayor pobreza de nuestro país la padecen y sufren los menores. De hecho, en su mayoría, no podrán escapar de la miseria que les espera al ser adultos.
¿Por qué es tan importante que la sociedad se involucre en solucionar activamente los problemas que afectan a la parte de la sociedad más vulnerable?
Los estudios longitudinales sobre la pobreza (durante 45 años) son demoledores: El 80% de los que nacen pobres, siguen siendo pobres cuando son adultos… y el 26% que no nacieron pobres, ahora sí lo son.
Expone Carlos Martínez Mongay, economista y ex director general adjunto de la Comisión Europea: «No cabe duda de que el ingreso mínimo vital va a paliar los efectos económicos de la pobreza en España. Sin embargo, los sistemas de protección social de este tipo actúan una vez que uno es pobre, pero no están concebidos para evitar que la pobreza se perpetúe».
Es decir, paliar no es resolver. De hecho, el IMV, no basta en la mayoría de casos ni para pagar el alquiler de una vivienda mínimamente digna.
La mayor desigualdad de una sociedad moderna es el grado y porcentaje de pobreza.
«En España hay 12 millones de personas en pobreza extrema»… Es decir, uno de cada cuatro ciudadanos, uno de cada 3 niños, más del 50% de sus ancianos, el 43% de las familias monoparentales, incluso el 16% de los trabajadores no escapan de la miseria.
Somos unos de los países de la Unión Europea con más pobreza en donde un 26,1% de la población está en situación de vulnerabilidad. Este indicador tiene en cuenta la renta, la carencia material o el nivel de empleo de los distintos miembros de la familia.
El IMV que ofrece el Estado, si es que tienen la suerte de conseguirlo (48% se estima que no lo conseguirá), para paliar los efectos de esta trágica situación no basta ni para pagar el alquiler en Baleares.
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