El Parlamento de Baleares aprueba medidas para proteger a los niños y adolescentes del consumo de bebidas energéticas
Protección de la salud pública, particularmente la de los niños y adolescentes, al aprobar una serie de medidas dirigidas a regular el acceso y la publicidad de las bebidas energéticas. El diputado del PSIB-PSOE, Àlex Pitaluga, ha liderado esta iniciativa en la Comisión Parlamentaria de Educación y Universidades, subrayando la importancia crucial de salvaguardar a las generaciones más jóvenes de los riesgos asociados con el consumo de estas bebidas.
El enfoque de estas medidas es multifacético, abordando tanto la necesidad de recopilar datos precisos sobre el consumo actual de bebidas energéticas en las Islas Baleares como la implementación de medidas concretas para regular su venta y publicidad. Entre los puntos clave propuestos por el PSIB-PSOE se incluyen:
- Realización de un estudio exhaustivo sobre el consumo actual de bebidas energéticas en las Islas Baleares.
- Implementación de medidas de protección en la venta y publicidad de estas bebidas en los establecimientos comerciales de las Islas.
- Lanzamiento de campañas de sensibilización dirigidas a familias, estudiantes, profesores, personal sanitario y trabajadores del sector alimentario.
- Prohibición del consumo de bebidas energéticas por parte de menores en entornos escolares.
- Restricción de la publicidad de estas bebidas dirigida a menores.
Esta propuesta legislativa ha sido respaldada por las federaciones de Asociaciones de Padres y Madres de cada isla, quienes han destacado la falta de transparencia en la información proporcionada sobre las bebidas energéticas. Según señaló el diputado Pitaluga, estas bebidas suelen contener altos niveles de cafeína, taurina y azúcar, lo que representa un riesgo significativo para la salud, especialmente en el caso de los jóvenes.
Para ilustrar la magnitud de este problema, Pitaluga presentó datos alarmantes: una lata de bebida energética puede contener hasta el equivalente de tres a cuatro dosis de cafeína de un café, junto con entre 11 y 15 terrones de azúcar. Además, algunas bebidas energéticas promocionadas por influyentes en las redes sociales pueden contener hasta 56 mg de cafeína por cada 100 ml, lo que supera con creces los niveles considerados seguros.
Los efectos nocivos del consumo de estas bebidas van desde la irritabilidad y la ansiedad hasta trastornos del sueño y problemas de rendimiento escolar, según advirtió Pitaluga, citando un informe del Comité Científico de la Agencia de Salud Alimentaria y de Nutrición del Ministerio de Consumo y Agenda 2030. Este informe también destaca los riesgos cardiovasculares, hematológicos, neurológicos y psico-comportamentales asociados con el consumo de bebidas energéticas.
En última instancia, esta legislación representa un importante paso adelante en la protección de la salud pública y el bienestar de los jóvenes en las Islas Baleares, enviando un mensaje claro sobre la importancia de regular la disponibilidad y el marketing de productos que representan riesgos significativos para la salud, especialmente entre los segmentos más vulnerables de la sociedad.
