Argentina elige a Javier Milei, el libertario antisistema, como presidente

En una sorpresiva y contundente victoria, el candidato libertario antisistema, Javier Milei, derrotó en las elecciones del pasado domingo al actual ministro de Economía, Sergio Massa, quien reconoció su derrota incluso antes de que se conocieran los resultados oficiales.

Con el 99% de los votos escrutados, Milei logró un amplio triunfo con casi el 56% de los votos frente al 44% de Massa. Este resultado representa un cambio significativo en el panorama político argentino, marcado por años de dificultades económicas y una inflación cercana al 140%.

«Hoy comienza la reconstrucción de Argentina. Hoy comienza el fin de la decadencia argentina. Se termina el modelo empobrecedor del Estado omnipresente», declaró Milei, ataviado con saco y corbata, frente a un gran cartel oficial como presidente electo. Destacó el hecho de ser el primer presidente «liberal y libertario» en la historia de la humanidad, señalando un hito en la dirección política del país.

Milei, un economista de 53 años que irrumpió en la política hace apenas dos años, logró captar la atención del electorado con propuestas disruptivas en el ámbito económico y un estilo agresivo, caracterizado por declaraciones polémicas y la portación de una motosierra en sus actos para simbolizar el recorte del gasto público que propone.

Con la promesa de privatizar las empresas estatales, reformar los sistemas de salud y educación, eliminar el Banco Central y dolarizar la economía, Milei se ha posicionado como un agente de cambio radical en medio de la crisis económica y la desilusión de muchos argentinos con los partidos tradicionales.

En su discurso de victoria, Milei anunció que a partir del 10 de diciembre se convertirá en el primer economista en ocupar la presidencia del país. Sin embargo, enfrenta desafíos significativos, ya que carece de mayoría en el Congreso y se encuentra con la oposición de los gremios y movimientos sociales.

Durante la campaña, Milei generó controversia al proponer ideas como permitir el porte de armas y la venta de órganos, así como al cuestionar el cambio climático, oponerse al aborto legal y criticar al papa Francisco. Estas posturas más extremas, sin embargo, fueron suavizadas de cara al balotaje, donde logró conectar especialmente con los electores más jóvenes descontentos con la situación actual del país.

La victoria de Milei también recibió el reconocimiento de figuras internacionales de la política, como el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, quienes felicitaron al nuevo mandatario argentino.

El desafío para Milei será llevar adelante sus propuestas en un contexto político y social complejo, marcado por la resistencia de sectores tradicionales y la división en el espectro político argentino. La sensación de crisis infinita en Argentina ha abierto espacio para un discurso más radical, y Milei buscará cumplir con las expectativas de aquellos que anhelan un cambio real en el país.