Carolina Marín gana su sexto Europeo haciendo historia en el Badminton
Carolina Marín sigue haciendo historia. La onubense se proclamó campeona de Europa por sexta vez consecutiva después de vencer en la final disputada en Madrid a la escocesa Kirsty Gilmour por (21-10 y 21-12). La española volvió a dar una exhibición para volver a subirse a lo más alto del podio un año después de su grave lesión de rodilla que le dejó fuera de los pasados Juegos Olímpicos.
El primer juego, pese a la resistencia inicial de su rival, lo resolvió con un parcial de 11-4. La energía de Gilmour, clave en los primeros compases del partido, se vio opacada por el dominio de la Carolina Marín en defensa y en ataque, haciendo el partido una pesadilla para la británica.
Aún con la euforia del gran cierre de set, el inicio del segundo fue un calco del primero. Pese a ello, con el poso y la calma que siempre caracteriza a las grandes campeonas, un parcial de 5-0 puso la distancia necesaria en el marcador como para que la tranquilidad volviese a la pista de Madrid. El segundo y último juego se fue cerrando poco a poco, controlando Marín el tempo de un partido en el que Gilmour apenas consiguió 21 puntos en ambos sets y acercando su sexto europeo.
Después de exhibirse el viernes para meterse en la final del sábado, Carolina Marín no falló en la cita más importante del último año. Después de una lesión de rodilla que le obligó a perderse los Juegos de Pekín, la española regresó por todo lo alto para sumar su sexto Campeonato de Europa consecutivo.
🏆🏸¡@CarolinaMarin, campeona de Europa 11 meses después de su lesión en el ligamento cruzado!
— Teledeporte (@teledeporte) April 30, 2022
➡ Volvió en Madrid, en un Europeo, y jugó como si no le hubiera pasado nada en la rodilla.
CAROLINA MARÍN, UNA DE LAS MEJORES DEPORTISTAS ESPAÑOLAS DE LA HISTORIA. pic.twitter.com/CiJgMAKG3W
Y no le tembló el pulso ante la número 3 del ranking al que venció por tercera vez en una final. El primer set lo solventó por la vía rápida (21-10) y en el segundo se mostró contundente cuando su rival amagó con una pequeña remontada. No la hubo porque Carolina Marín es única y volvió a dar una golpe sobre la mesa en el deporte mundial después de una grave lesión de rodilla.
El triunfo de la onubense fue una liberación. Ya durante los partidos soltó algunos gritos de júbilo fruto de su gran nivel, pero todo ello no era nada comparado con la emoción que supuso levantar su sexto europeo. Marín perdió a su padre en los primeros compases de la pandemia por una caída y ha pasado un año durísimo marcado por su grave lesión en la rodilla, haciendo que este título sepa mejor que nunca. En el podio, visiblemente emocionada, se pudo observar como le dedicaba el título a su padre.
