Ya es Navidad
Ya estamos en Navidad. Poco ha cambiado de hace unos días a este hecho, obligándonos a olvidarnos de los problemas cotidianos y de los problemas del mundo.
Ya es Navidad, y sin embargo no sugiere en mí ningún estado de ánimo especial, puesto que mi vida sigue los 365 días del año con la necesidad de seguir luchando, por los míos, por hacer lo que me gusta y proporcionar en la medida de mis posibilidades, afecto, amor y ternura.
Esta Navidad, pero también el resto del año, disfrutad de la buena compañía, de los amigos, de la familia. Leer un libro (poesía, novela, relatos…). Pensad en un momento en quienes están a vuestro lado o quienes se han ido. Guiñar un ojo a la suerte, y esperad el año nuevo.
Para todos aquellos que están solos, para aquellos que sufren, los que no encajan, los que sufren acoso o violencia, que la vida os devuelva la luz y la alegría.
Ven.
No temas.
No hay fronteras.
No hay miedo.
No te escondas.
Ven.
Salgamos al sol,
al aire que roza la piel.
Al descuido.
Al amor.
A la esperanza.
Los hijos de la tierra somos los mismos.
Los hijos de la tierra respiran el mismo aire.
Los dueños de las bombas, de la pistola,
justifican lo injustificable.
Matan… matan como una epidemia,
las ganas de soñar,
de vencer,
de amar.
Ven por el camino de la sonrisa,
ven por el camino de mi rostro,
mi piel con tu piel,
tu vida y la mía.
Ven y no temas,
no existe el miedo,
solo la sombra
que ellos quieren
que aprendamos.
Porque no hay hueco
ni escombro,
donde puedan esconder
la libertad de tu mente,
la libertad de tus manos.
