Renacer de las hojas muertas

cayendo silentes como plumas

en el planeo de sus caídas

en su vuelo inimaginarias formas

arrastradas por la brisa

que les revive el alma

efímero tiempo entre la vida y la nada.

En su caída

mil colores ante la vista

algunos de un rojo que me recuerda

cuando te veo tan colorada

desde los pies a la cabeza

los movimientos de tu roja falda

asemejándose cuando vuela con el viento

a esos colores de la hoja caduca.

Perspicaz circunstancia

ella muere, a ti te da vida

como la que das a quien te mira

la hoja alimenta a sus hermanas nacientes y vivas

tú la imaginación alimentas

pensamientos de amor salvaje, palpitan

en el estómago revolotean las mariposas

ejército de amor en su lucha.

En tus sentimientos el despertar

de lo que siempre aparece en el azar

llegando de no sé que galaxia

que te despierta desde dentro

tus ojos te ciegan

diferente de la realidad

en un sueño irreverente convertida

hacia adentro una maravilla

hacia fuera… Todo se olvida.

Abro los ojos, las hojas vuelan

al son que marca la brisa

aterrizando con total suavidad

acariciando el suelo que pisan

como tus labios cuando mi piel besan

en ese juego de labiales caricias

esos labios rojos que me hipnotizan

cada momento en que alzo la mirada

para alcanzar tus ojos, tus pupilas.

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