El pueblo se manifiesta

El tráfico va disminuyendo en la ciudad de París, la gente se va dirigiendo poco a poco hacia la plaza de la Bastilla, al pasar de los minutos se va llenando de pancartas de todos los colores y eslóganes…

En poco menos de una hora ya la plaza está abarrotada de gente de todas la ideologías, de derechas, de izquierdas, de centro, hay gente de todos los colores políticos, gente que se siente engañada por su gobierno, prometieron muchas cosas y sólo hicieron todo lo contrario. Todos los derechos conseguidos en décadas por los ciudadanos del País han sido eliminados por unos pocos fachas que gobiernan todo, han quitado la sanidad pública, sanidad pagada por todos directamente de sus salarios sin preguntar si se quiere esta sanidad o una privada, lo han privatizado todo, pero se lo han regalado a sus amigos y jefes, los banqueros, los ricos, los que no quieren que el ciudadano normal tenga derecho, sólo obligaciones.

Hay una enorme tasa de paro, paro que han provocado las políticas del Gobierno, eliminando cualquier pago por despido, eliminando los subsidios por lo que también se pagaba una cuota directamente de los sueldos de cada uno, intentando eliminar las pensiones con la excusa de que ahora ya se vive demasiado tiempo, además de alargar el tiempo cotizado para alcanzar el derecho a poder cobrar la jubilación pertinente.

Todo ello se agrava porque cada vez cuesta más el poder cotizar al no tener trabajo. Los ingresos de las familias no llegan para poder comer, los alquileres y los precios de las viviendas están inalcanzables, y para colmo quieren eliminar los derechos a manifestarse, sancionando con la cárcel al que lo haga y no se vaya cuando la policía se lo diga. Así un derecho tras otro son eliminados por el Gobierno en favor de unos pocos ricos que lo quieren todo para ellos, haciendo que los ciudadanos vayan a pedir limosna a cambio de un mendrugo de pan.

El gobierno ordena que se carguen a los manifestantes

No es casual que la manifestación se haya convocado en la plaza de la Bastilla, es un aviso del pueblo al los gobernantes de que ya están hartos y que lo mismo les da morir de hambre que morir apaleado por los perros de los antidisturbios que allí se han concentrado. Morir por morir, morir luchando y no sentado ante una televisión controlada por el poder, en la que no hay nada que pueda llenar los hambrientos estómagos ni las mentes de los ciudadanos. Este Gobierno ya se ha olvidado que los grandes imperios desaparecieron porque se olvidaron de que el pueblo también come, no solo la ambición de los ricos, ésta sólo sirve para destrozarlo todo, incluso su propio imperio, al igual que todos los demás.

El gobierno no ha querido autorizar esta manifestación y ha ordenado a los perros que carguen contra los manifestantes, hay que disolver la manifestación, estas cosas no se pueden permitir, no se puede permitir el desorden, la desobediencia, ellos mandan y hay que obedecer. El gobierno ya se cree Dios todopoderoso, sabe que cuenta con el apoyo de Don dinero, el apoyo del gran capital, el que estruja al pueblo.

Paradoja importante, se olvida el gran capital de que ese capital lo han hecho con el sudor de los ciudadanos que quieren esclavizar, del ciudadano al que ya no le queda ni un euro para gastar y comprar sus productos, los productos que fabrican sus empresas, los productos que les han hecho millonarios y les han llevado al poder absoluto en unos gobiernos supuestamente democráticos y que parte del pueblo todavía cree que es así.

Los gases debilitan a los manifestantes

La policía está sacando sus fusiles para lanzar gases lacrimógenos a los manifestantes, cosa que hacen sin esperas para que se vayan disolviendo, pero los manifestantes aguantan como pueden entre lágrimas y mala respiración, no les importa morir, sus despensas están vacías y sus estómagos rugen como si una manada de lobos estuvieran dentro, intentarán la lucha contra los perros hasta que sea necesario y si fallecen tanto les da morir hoy o mañana por la mañana.

La sangre está empapando el asfalto de los porrazos que están dando a una gente que solo tiene sus propias manos como armas, los perros armados hasta los dientes y vestidos con sus trajes antigolpes y antibalas no se enteran del destrozo que están causando en los manifestantes, cada vez hay más sangre por los suelos, pero los perros no se amilanan ni los manifestantes tampoco. Los gases están haciendo su efecto, los manifestantes están debilitados y poco a poco se van disolviendo, y marchando para casa.

La policía controla a los periodistas que allí se han acercado, procurando que sólo queden los que son afines al poder y que sólo salga al público en general que unos cuantos manifestantes se han enfrentado violentamente a la policía por lo que esta ha tenido que defenderse.

En la  secreta oficina de control y seguimiento del ciudadano parisina ya se tiene controlada a la gente que ha acudido a la manifestación, tienen el control total de los chips y han recibido la orden de que poco a poco se vaya eliminando a todos los manifestantes, uno por uno, cosa que ya están haciendo con los heridos de la manifestación al tiempo que la policía acusa a los difuntos de ser los agresores y que no han tenido más remedio que cargar contra ellos ya que eran un auténtico peligro para el resto de la ciudadanía.

La gente cree lo que no es

Por la televisión, en las noticias, se informa de los hechos y la gente se cree todo lo que se dice, alegrándose de que se haya eliminado a los terroristas que atentaban contra la ciudadanía. En los días sucesivos muchos accidentes de coche acabarán con las vidas de los manifestantes, otros morirán de muerte natural o accidental en sus miles maneras de producirse.

El Gobierno no se puede permitir que se propague la verdad, Internet está totalmente intervenida, los medios de prensa todos controlados por el poder, las televisiones ídem de ídem, incluso los teléfonos, en cuanto hay alguna escucha un tanto peligrosa se producen interferencias, dicen que causadas por la contaminación y las radiaciones solares. Pero el País sigue en una excelente y envidiable democracia, donde los ciudadanos eligen a sus mandatarios para que les consigan más derechos y defiendan los que ya tienen….

Las patrulleras del Sena van recogiendo algunos cadáveres de gente que se ha caído al río y se ha ahogado, no se conocen las causas, pero seguro que los forenses dirán que fue una ligera indisposición, incluso que fue por la comida ingerida en algún restaurante, restaurante que cerrarán con la excusa de que la causa de las muertes fue una intoxicación provocada por su comida o cualquier otra excusa que algún inocente ciudadano tendrá que pagar.

La justicia al servicio del poder

De la justicia mejor ni hablamos, toda está al servicio del poder, solo basta ver como unos cuantos casos que estaban siendo juzgados y que eran gente del partido que está en el poder, que antes, cuando gobernaba la actual oposición, eran ya, sin juzgarlos, culpables y enemigos públicos nº 1, ahora que han entrado ellos al poder resulta que su delito no era nada y ya no son culpables o el delito ha prescrito. Así sucesivamente se podrían enumerar muchísimos casos. Conclusión, la justicia ya no es imparcial, ni lo era ni lo será…

París estos días está imposible, hay tal cantidad de accidentes de circulación que casi no se puede circular, cosa curiosa, todos los accidentes son mortales, cuando el mismo tipo de accidente, meses atrás, solo resultaba en algunos golpes o rasguños… curioso, la gente ya no se plantea nada y sigue creyendo en su Gobierno, los sucesos de París nadie los recuerda ya o no se atreve a contarlos…

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