Las islas Gimnesias (en griego antiguo Gymnēsiai) es el nombre dado por los antiguos griegos a las dos islas mayores de las Baleares (España): Mallorca y Menorca; habitadas entonces por el pueblo talayótico. Los griegos distinguían así estas islas de las Pitiusas (Ibiza y Formentera).
Severo de Menorca (Iamona, s. IV) va sê Bisbe de Menorca a comensaméns d’es s.V, escribió la circular sobre la conversión de los judíos (418), donde expone cómo consiguió convertir a los judíos de Mahón gracias a un milagro. El obispo atribuyó el hecho de que un gran número de judíos que residían en la isla se convirtieran al cristianismo, a la presencia de las reliquias de San Esteban el protomártir, que habían sido depositadas en la iglesia de Magón (Mahón) por Paulo Orosio cuando retornó de Oriente y lo anunció en una carta a todos los eclesiásticos del mundo (417) titulada epístola ad omnes orbis terrarum Episcopos, Presbyteros, et Diaconos. La conversión masiva de Mahón es la primera de las que se tiene constancia en occidente. La estrategia fue de carácter religioso, evitando cualquier violencia física y cualquier víctima, aunque sí que los cristianos quemaron la sinagoga de Mahón, salvando los libros y la plata que se devolvieron a los judíos. Según la redacción de Severo, el único herido fue un esclavo cristiano golpeado por una piedra lanzada por un judío. Tras el rumor acerca de la conversión del líder de la comunidad judía, Teodoro, muchos judíos se fueron de Mahón.
En es còdex Saint Aubert (s.XIII) Bibliotèque de Cambrai, carta d’es Bisbe Sever de Menorca, a la dreta hi llegim “Iamona ad occasum; Magona ad Orientem spectat”. Iamona (Ciutadella) ês a Ponent; Magona (Mahó), a Orient. Es Bisbe Sever de Menorca escrivía en llatí. (No en català).
Tanto Minorica como Maiorica son dos nesónimos (topónimo de una isla), designan a dos de una larga prehistoria, aunque aparecen muy tarde, después de una milenaria evolución. Según los estudios de José Amengual Batle, el primer documento que cita estos dos nombres sería el Obispo de Menorca Server en su carta del año 418 (Romanitat Tardana). En otra, ocasión, un anónimo las interpoló antes del siglo VII en una obra del siglo III, el Liber Generationis d’Hipòlit de Roma. Los griegos ya en el siglo V seguían con los nesónimos antiguos, algunos de los cuales eran legendarios. Durante la edad media aquellas denominaciones pasaron de la lengua latina a la mallorquina y surge Mallorca y Menorca. El Obispo Server parece ser que fue el primero en escoger la denominación MINORICA y MAIORICA, posiblemente cuando el latín desapareció en estas islas. En el siglo XII durante la presencia de los moros en Mayurqa, los noruegos ya habían adaptado a su lengua la forma Maiork y Menork.
Hipólito de Roma y el Obispo Server, no usaron más la antigua denominación del archipiélago mayor, aunque muchos autores escribían Gymnèsiai.
3 Comentarios
Es de esperar que los catalanistas sepan respetar la HISTORIA y asuman una cultura balear anterior a su existencia como ente gropolitíco aparecido después de muchas disputas feudales, monárquicas y sectoriales que a día de hoy aún siguen sin aclararse.
ResponderEliminarMenorca bien se merece el reconocimiento que le otorga la Historia.
ResponderEliminarMuy buen artículo!!
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