T. Sedi, parece ser que has conseguido adaptarte mejor que nadie a nuestra cultura.
S. Después de mi estancia en Alemania y posteriormente en Canarias, si te fijas, en Mallorca todos los germánicos están como en su hogar. Por otro lado, estas preciosas islas forman un archipiélago como lo es el canario. Sabía lo que me esperaba y ha resultado cómodo y gratificante convivir en esta tierra.
T. Te precede tu cuidada educación, eres respetuosa y te haces querer, respetar y admirar. Cierto que dejaste tu tierra, pero encontraste un nuevo hogar.
S. Así es, en ocasiones se ha de saber aceptar las cosas tal cual transcurren, afrontar los hechos y recordar lo bueno es un aliciente para la vida misma.
T. Debes tener mucho que contar, has vivido, viajado, tendrás lindas experiencias y seguramente algunas que sin ser un camino de rosas dejarían recuerdo que no se olvida fácilmente.
S. Siendo escolar, en mi país, asistía a clases de francés, no lo dominaba ni por asomo. Tuve que salir a la pizarra con la obligación de expresarme en esta lengua. Nunca podré olvidar la vergüenza que pasé por mi forma de hablar, mi acento y los nervios que me dominaban. La profesora no tuvo un trato delicado conmigo, más bien podría decirse que me lo hizo pasar muy mal. No lo he olvidado nunca. Me dolió esta situación.
T. En Mallorca, donde te he conocido, compruebo tu amor por el arte, la cultura y el “savoir-faire”, deduzco que no te fueron tan mal las clases de francés… aunque fueran con un suave acento persa.
S. Sinceramente, pienso más bien que es genético, aunque estudiando siempre se aprende. Mi madre me apoyó mucho, era coqueta, sutil y delicada. Gustaba de vestir bien, sabía valorar la elegancia, la belleza y la sabiduría. Tengo lindos recuerdos.
T. Mallorca, como también Canarias, con lo turísticas que son, ¿consideras que el arte ha encajado? Me refiero al buen arte. O ¿tal vez es cosa de minorías?
S. Mis conocidos y las personas que vienen de fuera de la isla se asombran. Poder comprobar la calidad artística de exposiciones y obras, surgidas de manos y mentes de isleños, nativos y residentes, compartiendo al lado de artistas internacionales, creadores excelentes que gustan y logran la admiración unos y otros de todo el público en general, es un logro muy halagüeño para quienes gustamos del fruto de su trabajo. Excelentes galerías de arte, estudios particulares, exposiciones y manifestaciones apadrinadas por los organismos oficiales de la isla, iniciativas privadas que reciben apoyo de los medios (tan importantes en la actualidad) y aquellos establecimientos que se han erigido en verdaderos templos de culto, para poder apreciar en un entorno natural e isleño, todo lo concerniente al arte. Todos tienen mucho mérito. No, no es cuestión de minorías, más bien todo lo contrario.
T. La perfección no existe, sin embargo, tú la rozas en muchos aspectos, no solo en tu exquisita educación, también en la imagen que luces siempre, el look como se dice. Supone esto que otra de tus grandes pasiones es la moda.
S. Efectivamente, ¿ves? Ahí afloran los genes que te hablaba. Admiro el buen gusto, me satisface ver a mis amistades que cuidan su look, como se dice, y, en el caso de que lo conjugue con sus modales, su educación, sabiendo adaptarse al entorno, la verdad, me encanta. Colaborar en un pase de modelos, al conseguir el equilibrio entre elegancia, sencillez, colorido y modernidad, es un premio. Una enorme satisfacción. En la isla hay muy buenos profesionales, jóvenes y no tan jóvenes que consiguen admiración y respeto. Esto es la cuna del “savoir- faire”. Ahora te copio la expresión. (y sonríe).
Entradas
.jpg)
0 Comentarios