Cada 22 de febrero se conmemora el Día Mundial de la Encefalitis, una fecha establecida en 2014 por la Encephalitis Society con el propósito de educar y concienciar al público sobre esta enfermedad neurológica. La encefalitis es una inflamación del cerebro que puede tener diversas causas, siendo las infecciones virales las más comunes.
Causas de la encefalitis
La encefalitis puede originarse por diferentes agentes infecciosos, entre los cuales destacan:
Virus del herpes simple: una de las causas más frecuentes y graves de encefalitis en todas las edades.
Arbovirus: transmitidos por mosquitos o garrapatas, como el virus del Nilo Occidental o la encefalitis japonesa.
Virus de la rabia: adquirido generalmente por mordeduras de animales infectados.
Enterovirus: que pueden causar infecciones gastrointestinales y, en raras ocasiones, afectar el sistema nervioso central.
Además, la encefalitis puede ser consecuencia de reacciones autoinmunitarias, donde el sistema inmunológico ataca por error el tejido cerebral, o de infecciones bacterianas y parasitarias menos comunes.
Síntomas y diagnóstico
Los síntomas de la encefalitis varían según la gravedad y la causa subyacente, pero comúnmente incluyen:
Fiebre alta.
Dolor de cabeza intenso.
Confusión o desorientación.
Convulsiones.
Pérdida de sensibilidad o movimiento en ciertas partes del cuerpo.
Alteraciones en la percepción sensorial, como problemas de visión o audición.
En lactantes y niños pequeños, los signos pueden incluir irritabilidad, fontanelas abultadas (zonas blandas en el cráneo), falta de apetito y vómitos. Ante la presencia de estos síntomas, es crucial buscar atención médica inmediata. El diagnóstico suele implicar evaluaciones clínicas, estudios de neuroimagen como resonancias magnéticas y análisis de líquido cefalorraquídeo mediante punción lumbar.
Tratamiento y prevención
El abordaje terapéutico de la encefalitis depende de su etiología. En casos de origen viral, especialmente los causados por el virus del herpes simple, se emplean antivirales como el aciclovir. Para otras causas, el tratamiento puede incluir antibióticos, antifúngicos o medicamentos inmunomoduladores. Además, es fundamental el manejo de los síntomas, que puede requerir hospitalización para monitoreo y soporte vital en situaciones severas.
La prevención de la encefalitis se centra en medidas como:
Vacunación: inmunizarse contra enfermedades que pueden provocar encefalitis, como sarampión, paperas, rubéola y varicela.
Higiene personal: lavado frecuente de manos y evitar compartir utensilios personales.
Protección contra vectores: utilizar repelentes de insectos, mosquiteras y ropa adecuada para prevenir picaduras de mosquitos y garrapatas.
Control de animales domésticos: vacunar a mascotas contra la rabia y evitar el contacto con animales salvajes.
La conmemoración del Día Mundial de la Encefalitis busca no solo informar sobre la enfermedad, sino también promover la investigación y el apoyo a quienes la padecen, fomentando una mayor comprensión y recursos para su manejo y prevención.
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