Don din, don Din, don Din
pedazo de c----n (Macho de la cabra)
la vida me estás jodiendo
al gran mamón los bolsillos hinchando
a mí de hambre me estás matando.
Pedazo de c----n (Macho de la cabra) mamoneo
de mi te alejas al primer aleteo
venirte a mi vera no deseas
sólo servir al gran mamón
sólo a ese quieres
ese que vive del mamoneo.
Don din, don Din, don Din
de mi te alejas
dime por qué
que te hago yo que de mi nada quieres
pero lo que tengo al gran mamón entregas
en pelotas y miseria
ni tan siquiera con barrica me dejas.
Me humillas de esa manera
perdón lo intentas
más poder no puedes
solo me humilla quién yo quiera.
Vete con el gran mamón
Atracón de don Din le de
que reviente de tanta carga
que de don Din vacuna no haya.
Adiós Don Din
a los pobres no te adhieres
sólo su sangre chupas
para que el gran mamón disfrute
más de hambre y frío en muerte me tienes.
A que viene todo esto, es un poema que hace tiempo le hice a Don Din, léase Don Dinero.
En especial a la forma de reparto en la sociedad. Aclaro, el dinero en sí no es malo, lo malo es que todo esté en manos de unos pocos. Ahora, puesto a analizar un poco, con la visión un poco más lejana y la realidad bastante más cercana, me doy cuenta de unos cuantos aspectos con los que no había caído, pero que si los notaba.
Primero: Cada vez que se imprime dinero somos más pobres.
Segundo: Cada día suben los precios, pero no los sueldos.
La subida de sueldos no tiene nada que ver con la subida de los precios, por lo que cada vez somos más pobres.
Tercero: A la mínima maniobra internacional, sean subidas de combustibles, guerras o cualquier otra cosa que pase en el entorno mundial, suben descaradamente los precios, sin que tenga nada que ver con los sucesos antes mencionados.
Llegando a la conclusión, los que tienen casi todos los dineros, ya no son personas concretas sino grupos económicos, nos quieren cada vez más pobres.
Al pueblo pan y circo, si miramos todos los sistemas de entretenimiento, TV, con toda su programación, Internet, la prensa oficial, etc. Tenemos un enorme circo montado, el pan, es fácil, cuatro ayuditas para que la gente se acomode en su sillón y en este País… ¡NO SE MUEVE NADIE!
¿Adónde llegaremos? Ni idea, mis dotes de adivino no dan para tanto.
✍ Toni Oliver
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