A raíz de la DANA, se ha desatado una ola de críticas hacia la gestión de la clase política y de algunas ONGs, especialmente aquellas que reciben importantes subvenciones públicas. Entre ellas, Cruz Roja ha estado en el centro del debate, siendo defendida por bancos, políticos y medios de comunicación, pero también señalada por una parte de la ciudadanía y antiguos miembros de la organización. En un reciente artículo de LA GACETA, se da voz a un exvoluntario de Cruz Roja en la zona de Almería, quien expone las presuntas deficiencias y problemas estructurales de la organización. A la vez, en un video disponible en RTBE Televisión, se pueden ver imágenes que ilustran lo acontecido, ofreciendo una perspectiva visual de las críticas vertidas.
El exvoluntario entrevistado sostiene que los jefes de Cruz Roja, quienes sí reciben salarios, se aprovechan de los voluntarios, quienes trabajan sin remuneración. Su relato detalla la falta de organización en la zona de Almería, donde predominaba la improvisación y lo que interesaba a los responsables era mantener a los voluntarios ocupados mientras ellos permanecían en la comodidad de sus casas. «Cuando llegaba un cayuco con víctimas, rara vez aparecía uno de los responsables, y si lo hacían, era sólo para la foto», afirma.
Además, denuncia que la ONG no cubría ni siquiera los gastos básicos de los voluntarios, como la gasolina, algo que contrasta con el trato que reciben los inmigrantes que llegan ilegalmente. Según él, cada persona extranjera que ingresaba en un centro de Cruz Roja recibía 50 euros semanales para gastos personales, además de ropa, comida y otros bienes.
En relación a la reciente DANA en la zona de Valencia, el exvoluntario señala la falta de eficiencia en la respuesta. Según su relato, mientras que para recibir una patera hay un despliegue de 20 personas, en este caso enviaron sólo seis personas días después del desastre, subrayando la falta de voluntad para movilizar recursos. «Si envían pocos voluntarios, no se les ve; si envían muchos, tienen que movilizar recursos y eso no les interesa», concluye.
Donaciones y subvenciones
En medio de la catástrofe generada por la DANA, se ha observado una fuerte campaña para dirigir las donaciones a Cruz Roja, promovida por instituciones bancarias y medios afines al Gobierno. El exvoluntario considera que esto refleja la influencia política del Ejecutivo de Pedro Sánchez, mencionando que en Almería, la organización está perdiendo el apoyo del ayuntamiento (gestionado por el PP) debido a este alineamiento. A su juicio, esto se debe a que Cruz Roja recibe considerables ingresos a través de herencias de personas mayores y donaciones de alimentos, que son distribuidos en parte a inmigrantes.
Los sueldos en Cruz Roja
Una de las críticas más contundentes del exvoluntario se centra en los salarios dentro de la ONG. Según sus palabras, algunos empleados cobraban, en 2019, hasta 2.400 euros al mes netos, sumando pluses por peligrosidad y otros incentivos, mientras que los voluntarios no percibían absolutamente nada. La organización, añade, dispone de vehículos de alta gama, como Mercedes y BMW, lo que alimenta la percepción de un uso poco austero de los recursos.
Otro aspecto que destaca es el enchufismo dentro de la organización, donde afirma que la mayoría de los cargos relevantes están ocupados por familiares y personas con vínculos personales cercanos, lo que pone en duda la transparencia y eficacia de la ONG.
Este testimonio proporciona una visión crítica sobre la gestión interna de una organización tan relevante como Cruz Roja, especialmente en contextos de crisis. Las declaraciones del exvoluntario se pueden contrastar con las imágenes disponibles en el reportaje de RTBE Televisión, que aporta elementos visuales para profundizar en la evaluación de estas acusaciones. La controversia está servida, y la reacción de la ciudadanía frente a estas revelaciones, así como la respuesta de la organización, marcarán el futuro de Cruz Roja en el ámbito nacional.
✍ RTBE Televisión
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