Somos más pobres y debemos más…
La deuda española sigue batiendo récords; ya superamos el billón y medio de euros.
Por otra parte, España es el país de Europa, sólo por detrás de Eslovenia, que menos ha subido los salarios.
Cuando el dinero que uno tiene para poder vivir ya no te basta para sostenerte, cuidado, es el campo de cultivo del radicalismo, revueltas y guerras.
En vez de centrarnos en pagar lo que debemos para que la «next generation» no maldiga nuestras tumbas al ver en qué agujero de mierda hemos metido su futuro, adelgazar en las administraciones públicas y entender que somos más pobres y hay que vivir con mucho menos de lo acostumbrado y centrarnos en ser más solidarios y conscientes de que tenemos cada vez más ancianos, dependientes, pobres y excluidos sociales…
Los inútiles que nos gobiernan nos tienen entretenidos con las sandeces de la, a todas luces, incompetente Irene Montero; dramas inmorales en nuestras fronteras con Marruecos y cambios de leyes para alimentar más el independentismo catalán que tiene agarrado por los huevos al sátrapa de Sánchez.
El Reino de España, es un país inmaduro democráticamente donde se confunde los ideales con ser capaces de gestionarlos correctamente. La izquierda se disfraza con lo ideal pero es la más incompetente para llevar acabo su utopía. En cambio, la rancia derecha, en vez de ponerse al servicio de la pluralidad cultural y libertades que entraña un país moderno, se centra más en ser la prolongación de los tentáculos de los lobbies de poder económico pernicioso y perpetuar credos basados en cuentos infantiles.
En este país sobran vividores de la política y hacen falta personas cabales, honradas y competentes que apliquen políticas con criterio científico y humanístico.
