A pesar de la barbárie y la sin razón, de bombas y fuego, la esperanza perdura y se mantiene en unos niños que llevan viviendo un mes en el metro de Kiev.
Y es que queridos lectores la vida siempre se abre camino. Espero poder ver algún día esta misma foto con estos niños adultos.

Colaborador
Más artículos
Traslado de 1.000 pacientes ucranianos a hospitales europeos
Ucrania alerta a activistas y periodistas de Jersón de que hay precio por sus cabezas
Discurso vespertino de Zelensky