La ADED y otras fuentes del sector comercial anuncian importantes incrementos de precios

La ADED y otras fuentes del sector comercial anuncian importantes incrementos de precios, entre 35 y 48 %, por la escasez derivada de los efectos de la crisis sanitiria del Covid-19 en la estructura de producción, transporte y logistica de ciertos alimentos.
Bartomeu Servera, presidente de la Asociación de Empresas de Distribución de Alimentos, Bebidas y Limpieza de Balears expone: «En los últimos meses la escalada de precios ha sido brutal en los productos de alimentación por falta materia grasa en toda Europa». Remarcando también el incremento de los fletes marítimos por parte de las navieras.
También mencionar que el último número de los Quaderns Gadeso indica que lo que más preocupa a la sociedad Balear es la economía, la falta y precariedad del trabajo. Percepción que según el estudio difiere de la percepción desde el estatus social de la persona; la rancia alta burguesía parece ser mucho más optimista que los que sufren siempre, aquellos que no se ‘recuperan’ haya o no buena bonanza económica.
Cada día que pasa hay una mayor parte de la sociedad que se ve ‘fuera de juego’ porque no importa lo bien o mal que evolucionen macroscópicamente las cosas, su situación se deteriora, los precios suben, la inflación galopa y la precariedad de sus vidas se incrementa.
Mientras, el 91% de las personas que solicitaron percibir las rentas mínimas de inserción (RMI) no la han conseguido en Baleares, mientras en el País Vasco y Navarra, se la han denegado sólo al 40%. En otras palabras, aquí sólo la cobran el 9% mientras que en esas otras comunidades lo han conseguido un 60%%.
Esto demuestra que la mayoría de las personas que llegan a la exclusión social y pobreza severa dejan de tener representatividad para los políticos y clase media y alta. Al dejar de ser ‘votos activos’ en las elecciones ya no tienen peso específico en la sociedad de la que forman parte. Esa parte de la sociedad más deprimida acaba enfermando, padeciendo un ‘síndrome de indefensión aprendida’.
La indefensión aprendida (o impotencia aprendida) describe la condición en la que las personas podemos acabar comportándonos pasivamente, con la sensación subjetiva de no tener la capacidad de hacer nada y sentirnos incapaces de responder a pesar de que existen oportunidades reales de cambiar la situación.
Esto es debido al modelo psicopático de nuestra sociedad en el que uno observa que haga lo que haga nunca alcanza los estándares de éxito social, personal y económico, así, desilusión tras otra, acaba tirando la toalla.
No todo el mundo tiene la suerte de haber nacido en un pueblo donde hay un club de tenis junto a tu casa, en el que tu tío es entrenador y se preocupa durante toda tu vida de que seas un buen competidor, como es el caso de Nadal, al que además de eso, le acompaño una excelente genética. O haber nacido en una buena familia con recursos para darte viento a favor toda la vida… Pero ahí están las series de televisión y las grandes competiciones deportivas, para que esa sea la idea que cale en tu subconsciente de lo que es un triunfador, cuando tú nunca has contado con las mismas buenas cartas en este juego que es la vida.
Hasta en un ‘Karaoke’ encuentras cantantes y artistas que lo hacen mucho mejor que los cantantes originales que, por cierto, nunca oirás hablar de ellos, por que nunca estuvieron en el momento adecuado, el lugar adecuado, personas adecuadas y medios adecuados, como tampoco todos los ‘negros’ que escriben las obras de muchos de los escritores prolijos y adoptados por las grandes editoriales.
Este mundo no es justo, porque la utopía de la justicia nos la inventamos nosotros para mentirnos a nosotros mismos.
Por eso inventamos la política, para que los políticos nos mientan mejor de lo que nosotros sabríamos hacerlo y soportar.

Director Contenidos y Audiovisual | Agente de Prensa | Mallorca