El Consell impondrá a partir de ahora multas por valor de 80.000 euros a quien realice alquiler ilegal
El conseller insular de Turismo, José Marcial Rodríguez, junto a la directora insular, Clara del Moral - CONSELL DE MALLORCA
Este tipo de sanciones varían desde los 40.000 hasta los 400.000 euros y hasta ahora se imponían en la horquilla más baja
El Consell de Mallorca ha implementado medidas más estrictas contra el alquiler turístico ilegal, estableciendo multas de hasta 80.000 euros para quienes infrinjan la normativa. Este cambio, que duplica la sanción mínima previa de 40.000 euros, tiene como objetivo disuadir la oferta no regulada y fomentar una competencia justa en el sector turístico de la isla.
José Marcial Rodríguez Díaz, conseller insular de Turismo, destacó que estas sanciones buscan eliminar la competencia desleal que afecta tanto a los empresarios que cumplen con la normativa como a la convivencia en las comunidades locales. Esta nueva política también pretende garantizar la seguridad jurídica y la sostenibilidad del turismo en la isla.
Además, siguiendo el Decreto de Simplificación Administrativa recientemente aprobado por el Govern, el departamento de Turismo del Consell de Mallorca incluirá la obligación de cese de actividad en todos los inicios de expedientes sancionadores. Los derechos de la persona sancionada se mantienen inalterables, permitiendo presentar alegaciones al expediente como se hacía hasta ahora. Así, se dispondrá de siete días para alegar sobre la exigencia de cesar la actividad, y el plazo para presentar alegaciones sobre la sanción será de 15 días, según el nuevo decreto.
También se ha lanzado una campaña para que los ciudadanos denuncien los alquileres turísticos ilegales. El Consell ha habilitado un correo electrónico específico para recibir estas denuncias y ha desplegado inspectores que, durante dos semanas, se enfocarán en vigilar y sancionar posibles incumplimientos, especialmente en Palma, donde el alquiler turístico en edificios plurifamiliares está prohibido.
Con estas medidas, el Consell de Mallorca espera reducir significativamente la incidencia del alquiler turístico ilegal y promover un turismo más sostenible y equitativo en la región.
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