Emergencias veterinarias caninas en verano: Clínicas cerradas y mayores riesgos de salud

En verano, muchas clínicas veterinarias cierran por vacaciones, justo cuando el riesgo de que nuestras mascotas se enfermen aumenta por el calor y las actividades al aire libre. Esto puede ser un gran problema para las familias y sus peludos.

Entre las principales razones para ir al veterinario en esta época están las espigas, los golpes de calor, los traumatismos, así como las intoxicaciones y las alergias en la piel.

Los expertos en animales recomiendan que, en caso de urgencia o si necesitas atención más completa, vayas a hospitales veterinarios. Ellos pueden darte un asesoramiento inmediato y especializado.

En España, más de 9,3 millones de perros forman parte de las familias. A lo largo del año, y dependiendo de la época, nuestros peludos se enfrentan a varios peligros. En verano, los riesgos son bastante claros: el aumento de enfermedades debido al calor y las vacaciones, y la falta de clínicas veterinarias abiertas porque muchas cierran o adoptan horarios reducidos por el descanso estival.

Es común ver un aumento en las visitas al veterinario durante los meses de julio y agosto. Las razones van desde problemas típicos del verano, como espigas, golpes de calor o traumatismos, hasta intoxicaciones o reacciones alérgicas que pueden ocurrir en cualquier momento del año.

Si notas algún comportamiento raro en tu mascota, es importante ir a un experto que pueda decirte qué le pasa. Recuerda que actuar rápido puede marcar la diferencia en la salud y el bienestar de tu perro.

Durante el verano, los perros son especialmente vulnerables a varios problemas de salud. Los traumatismos por accidentes aumentan debido a las actividades al aire libre y los paseos. Además, la proliferación de plantas e insectos incrementa las reacciones alérgicas. Las altas temperaturas son muy peligrosas y pueden provocar golpes de calor, especialmente en perros mayores o de razas braquicefálicas (como el bulldog francés o el Carlino), que tienen más dificultades para respirar.

Las espigas son otro gran enemigo para la salud de nuestros compañeros de cuatro patas. Pueden incrustarse en la piel, los oídos o la nariz, causando infecciones. Además, los cambios en la alimentación y el consumo de agua no potable pueden llevar a gastroenteritis. Durante las excursiones, también es más probable que los perros ingieran accidentalmente productos tóxicos.

Que hacer cuando la distancia de la clínica veterinaria puede ser un problema

Considerar Telemedicina Veterinaria: La telemedicina está en auge y puede ofrecer consultas con veterinarios para problemas no urgentes. Es una opción a considerar si la distancia es un problema.

Buscar Servicios Móviles: En algunas áreas, existen veterinarios que ofrecen servicios móviles, lo que significa que pueden acudir a tu hogar para atender a tus mascotas. Esto puede ser una solución conveniente si las clínicas están lejos.

Contactar Organizaciones Locales: Consulta con organizaciones locales de bienestar animal, refugios o grupos de rescate. A menudo, tienen conexiones con veterinarios que pueden ofrecer asesoramiento o incluso atención en situaciones de emergencia.

Utilizar Recursos en Línea: Hay varias plataformas en línea que ofrecen consultas veterinarias a distancia. Aunque no pueden reemplazar un examen físico, pueden proporcionar orientación sobre cómo manejar ciertos problemas.

Unirse a Redes de Apoyo: Formar parte de grupos comunitarios de dueños de mascotas en redes sociales o foros puede ser útil. A menudo, los miembros de estos grupos tienen recomendaciones sobre veterinarios en áreas cercanas o pueden compartir información sobre cómo tratar ciertas afecciones.

Educarse y Prepararse: Aprender sobre cuidados básicos y primeros auxilios para mascotas puede ser muy útil. Existen cursos y recursos en línea que te pueden enseñar cómo manejar emergencias menores y mantener a tu mascota saludable.

Promover la Apertura de Nuevas Clínicas: Si la falta de clínicas es un problema recurrente en tu área, considera trabajar con otros miembros de la comunidad para atraer a veterinarios a la zona o iniciar una campaña para abrir una nueva clínica.

Algunos consejos para evitar la consulta veterinaria

Ante la posible falta de clínicas veterinarias, los expertos explican que es crucial tomar medidas preventivas y saber cómo actuar en caso de emergencia. Entre las recomendaciones que comparten, están las siguientes:

Mantén a tu perro hidratado: Asegúrate de que siempre tenga agua fresca disponible.

Evita las horas de más calor: Saca a tu perro a pasear temprano por la mañana o al atardecer.

Conoce los síntomas de un golpe de calor: Como jadeo excesivo, debilidad o desorientación.

Revisa a tu perro después de pasear: Especialmente las patas, orejas y nariz para detectar espigas o insectos.

Ten un botiquín de primeros auxilios a mano: Incluye gasas, desinfectante, y los números de contacto de centros veterinarios de emergencia.

También, mantén siempre un ojo atento sobre tu perro, supervisando lo que come y por dónde camina, especialmente en áreas rurales o desconocidas.